miércoles, 23 de febrero de 2011

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Cada instante de la vida esta impregnado de experiencias, de las cuales hacemos parte, influimos y simultáneamente somos influenciado. Permanecemos en contante interacción a través de vínculos, de esa acción cotidiana, de la cual se desprende la calidad de las relaciones que vamos formando a través de redes.
Desde que nacemos formamos parte de una red y en el transcurso de nuestra vida, nos unimos, creamos e interactuamos en otras, llámesele familia, amigos, compañeros de universidad, etc. Es muy cierto que nos enfrentamos a un cambio de sociedad donde estar dispuesta a nuevos vínculos, a nuevas relaciones abre redes y las fortalece. Donde la cibercultura nace como el surgimiento de nuevas formas de sociabilización, generando diferentes y mejores formas de relaciones sociales,donde se pueda desarrollar la autonomía regional y sectorial de grupos y redes sociales, como sistemas abiertos  a la interacción, creación y desarrollo de nuevas formas reflexivas y constructivas de un proceso de reconstrucción social.
De esta manera dejaremos atrás, el mundo de la informacion , que por mucho tiempo a venido ejerciendo  relaciones verticales, donde la interacción y conciencia del individuo han sido manejadas como entes separados del exterior, es decir siendo observadores de la imposición  que se repliega sobre sí misma, siguiendo de esta manera al que se encuentra arriba, sólo uno.  
Solo si dejamos de lado al mundo de la información y le damos paso al mundo de la comunicación, veremos que la colaboración y  la creación, conforman lo posible, ya que este mundo de la comunicación ejerce su poder en las relaciones horizontales, que incluyen y a su vez son incluidas, generando vinculaciones totales. 
Cada uno de nosotros percibimos el mundo de diferente manera e imaginamos posibilidades que giren entorno a este mundo. Solo si imaginamos posibilidades podremos percibir mundos posibles, donde la cultura de la información sea impulsada y la cultura de la comunicación sea construida, desarrollando redes que permitan vínculos de sobreviviencia y colaboración. Es muy cierto que los avances científicos y tecnológicos, han modificado nuestro entorno y nuestras circunstancias, las grandes cantidades de información que recibimos todos los días provenientes de latitudes tan diversas y  lejanas,  resulta imposible en algunos casos saber de donde proviene ya que se está desconectada del imaginario social. Lo que necesitamos es reinventar el modo de hacerla llegar a todas partes, construyendo nuevos sistemas de comunicación alternos.
Al entender lo anterior estaremos siendo parte de la Comunidad de la comunicación, ya que se presenta como una alternativa en la que sí, se es consciente de que se puede crear un mundo con libertad; libertad que la vida social otorga,  se puede pasar de la actividad creativa a la actividad constructiva, entendiendo que hay lugar para todo y para todos, ser parte de este cambio es un reto enriquecedor. Que va direccionado al cambio de civilización, en una nueva orientación en la forma cognitiva de percibir y organizar la vida.

1 comentario:

  1. Ederlinda,
    Los enfoques y aproximaciones que das revisten buen interés, las hipervinculaciones pueden ser mejores en tanto se acerquen mejor a las experiencias reales.

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